Karl Barth sin duda alguna fue una de las figuras más polémicas de la teología del siglo 20. Aunque el enfoque de Él Heraldo Cristiano es promover el cristianismo conservador se ha decidido incluir a Karl Barth en esta lista porque como se titula esta sección “cristianos influyentes del siglo 20”, no podemos hablar de los cristianos influyentes del siglo 20 y a la misma vez ignorar a Karl Bart.
Es necesario aclarar que Barth no está en esta lista porque fue un Cristiano conservador si no porque hizo grandes aportes al cristianismo conservador del siglo 20 en adelante. Históricamente los cristianos evangélicos hemos tenido una relación de amor y odio con Karl Barth. Debido a que Barth si bien no fue un teólogo liberal tampoco fue un teólogo conservador más bien a él se le conoce como el padre de la teología neortodoxa. Es decir que en algunos puntos coincide con la teología conservadora y en otros no.
Barth nació en Suiza y era miembro de la iglesia Reformada hijo de padres Cristianos. Es muy importante destacar que el mundo cristiano protestante que predominaba durante la niñez, la adolescencia y la adultez de Karl Barth era de corte totalmente liberal. Frederick Schleiermacher (1768-1834) el padre de la teología liberal protestante, era el que dominaba toda la teología protestante en Europa desde su época en adelante. Toda la preparación teológica en los colegios y seminarios europeos no era nada más que comentarios a las obras de Schleiermacher. Este fue el transfondo doctrinal de Karl Barth, él había sido educado teológicamente en el pensamiento liberal de Schleiermacher, también bajo la influencia de la alta critica textual de Adolph Von Harnack (1851- 1930) y Julius Wellhausen (1844-1918) . De hecho Barth fue alumno de Harnack (al igual que tambien lo fue Dietrich Bonhoeffer.)
Fue ordenado al ministerio en el 1908 fue durante su pastorado en Safenwill entre el 1911 y el 1921 cuando Barth cuestionó muchas de las enseñanzas de la teología liberal en el sentido que él veía que no correspondían con las necesidades del hombre cotidiano. La comunidad en Safenwill, estaba compuesta por personas pobres de la clase baja de la sociedad plagados de problemas sociales, múltiples enfermedades, explotación por parte de los dueños de las fabricas etc. Barth notó que el dios de la teología liberal era un dios pero en teoría solamente y en el mejor de los casos era un dios que pertenecía al Deísmo. Este dios no llenaba las necesidades del hombre y la mujer de su comunidad porque no podía darles ni consuelo ni esperanza.
En el 1919 escribe su comentario a Romanos con el cual creó un escándalo en la teología liberal europea. De tal manera que fue llamado como profesor en 1921 en Gottingen.
En 1935 con la llegada de los nazis, al poder la escuela requería que todas las clases comenzarán con un saludo de lealtad a Hitler, en vez de la acostumbrada oración y un himno. Barth se negó y fue destituido de su catedra de enseñanza.
Barth continuó oponiéndose al nazismo a tal punto que llegó a aconsejar a los cristianos de Europa que trabajaran con los gobiernos comunistas aunque él mismo no fue comunista ya que despreciaba todo tipo de totalitarismo. Fue uno de los arquitectos del Concilio Mundial de iglesias. Viajó a los Estados Unidos en el 1962. Murió en su fe cristiana después de haber orado “tranquilo y confiando que se presentaría ante Dios como un pecador justificado.” *
Desde los días de Frederick Schleiermacher no había existido una persona que fuera capaz de hacerle frente a las enseñanzas del cristianismo liberal. De hecho desde los días de Frederick hasta los días de Barth toda la teología europea no era más que una repetición de las enseñanzas de Frederick Schleiermacher pero en varios idiomas. Karl Barth fue la figura intelectual y académica que pudo no solamente darles respuestas a la influencia liberal de Schleiermacher sino también ponerle un freno efectivo en los seminarios y universidades. Rechazó la figura de un Cristo imaginario. Rechazó la eliminación de los milagros y una teología centrada en el hombre en vez de una teología centrada en Dios. Aparte de su comentario a Romanos Barth escribió su obra más célebre que fue su dogmática de la Iglesia (Church Dogmatic) entre 1932 y 1968 que contiene más de seis millones de palabras y al momento de su muerte aun todavía no la habia terminado!
Él legado de Barth fue devolver una fuerte confianza en la Biblia como el texto autoritario para los cristianos. También restauró en los seminarios y escuelas de preparación ministerial el concepto que Dios es verdaderamente Dios y no una expresión del hombre (como sostuvo Schleiermacher). La figura central de su teología fue la persona y la obra de Cristo. Barth devolvió le dio la razón a la ortodoxia y al cristianismo conservador en casi todos los temas.
Dicho estas cosas, hay que también recalcar que Barth no era conservador. De hecho él recibió muchas críticas de los conservadores entre ellos del teólogo fundamentalista y apologeta americano Cornelio Van Til. En cuanto a la Biblia Barth afirmaba que aunque la Biblia es un libro importante no obstante objetivamente la Biblia no es la Palabra de Dios. Sino que la Biblia llega a ser la Palabra de Dios para el creyente cuando el creyente la recibe por medio de la fe. De esta manera Barth se distanciaba de los liberales los cuales tenían a la Biblia solamente como una expresión del hombre carente de un componente sobrenatural o divino. Desde luego para los ortodoxos y conservadores tales como Cornelio Van Til, Gresham Machen, Warfield y otros la Biblia no solamente llega a ser la Palabra de Dios para el creyente por medio de la fe, sino que la Biblia es la Palabra de Dios para el creyente y para mundo.
La influencia de Karl Barth fue tal que en el 1962 la revista Time le dedicó un artículo elogiándolo, incluyendo su foto en la portada de dicha revista. Por su erudición bíblica , conocimiento de los argumentos liberales y su incesante practica de escribir y publicar, Barth se había convertido en el enemigo número uno de los seminarios y colegios liberales.
Así como mismo Frederick Schleiemacher fue el padre de la teología liberal, Barth fue el padre de la teología neortodoxa. Los neortodoxos estaban representados por Barth, Emil Brunner (1889 –1966), Rudolph Bultman (1884 -1976), el existencialista cristiano Paul Tillich (1886 – 1965) y por los hermanos teólogos americanos Reinhold Niebuhr (1892 – 1971) y Richard Niebuhr (1894-1962) (entre otros menos conocidos).
Esta variante del pensamiento protestante y evangélico fue tan popular que aun el propio Dietrich Bonhouffer también fue parte de la neortodoxia. La neortodoxia no era un bloque unido en cuanto a su teología. Aunque Barth estaba muy cerca de Brunner, se distancio de el al Brunner adoptar posiciones más liberales, Ejemplo: Brunner abogaba por una Revelación Natural mientras que Barth abogaba por una Revelacion Especial. Barth escribió un ensayo titulado “Nein!” o “No!” en respuesta a las enseñanzas de Brunner sobre la revelación natural. También se distancio de Rudolph Bultman cuando Bultman comenzó a poner en duda la inspiración de la Biblia y la propia resurrección de Cristo.
Es necesario hacer hincapié en que Barth al haber sido educado por los liberales manejaba casi a la perfección sus mejores argumentos y pudo con mucho éxito enfrentarse a ellos y rebatir sus argumentos de manera exitosa y convincente. Cosa que hasta ese entonces la teología ortodoxa o conservadora no había sido capaz de hacer a nivel de las altas esferas académicas como lo hizo Barth.
Criticas a Karl Barth.
No obstante los conservadores aunque apreciaban el aporte que Barth había hecho al pensamiento teológico también ellos ofrecieron sus críticas y sus advertencias.
Se critica a Barth en 3 áreas en el área política su aproximación al socialismo. Ya que aunque Barth no era comunista en sí, en su afán por ayudar a los pobres y a los explotados se aproximó a las ideas socialistas, de tal manera que lo apodaron como el “Pastor Rojo”.
En el área de la teología sus críticos ortodoxos señalaban que Barth usaba palabras conservadoras pero con otros significados. Por ejemplo: En en el área de la ontología cuando Barth hablaba acerca del Ser de Dios, no creía que Dios tiene una naturaleza divina. Para Barth lo que define a Dios no es su naturaleza sino sus obras. En defensa de Barth, él pensaba de esta forma porque en su mente al decir que Dios tiene una naturaleza divina, as afirmar que Dios tiene una naturaleza y que por lo tanto esto equivale a limitar a Dios a esa naturaleza. Mientras que para él, lo que define o lo que es Dios o el Ser de Dios, son sus hechos o sus obras. Es decir que lo que define a Dios no es su naturaleza sino sus obras. Mientras que según rebatió Cornelius Van Til y otros cristianos conservadores los hechos y las obras de Dios no es más que una expresión de la naturaleza de Dios. De esta manera señalaban los conservadores que Barth usaba términos conservadores pero con conceptos diferentes.
En cuanto a la elección o predestinación, históricamente los calvinistas o reformados sostienen que Dios ha elegido a personas para la salvación. Mientras que Barth sostenía que lo que Dios eligió fue elegirnos en Cristo. De esta manera Barth podía hablar de la doctrina de la elección sin ser ni arminiano ni calvinista.
De hecho los teólogos conservadores advierten que el cristianismo de Barth no es un cristianismo ortodoxo histórico Cristiano sino que es toda una reinterpretación del cristianismo histórico. Cabe destacar que hoy en día existe lo que se conoce como la escuela Barthiana por los seguidores de Barth, o el “Centro Para Estudios de Barth”, Center For Barth Studies, en el Seminario Teológico de Princeton, New Jersey donde se estudia y se propagan sus ideas.
Finalmente los críticos conservadores de Barth, señalan a sus fracasos morales. Aunque Barth, creía en la resurrección de Cristo y era un cristiano nacido de nuevo, él sostuvo una larga y conocida relación extra matrimonial con su secretaria. A tal punto, que llegó a mudar a su secretaria / amante de muchos años dentro de su hogar juntamente con su esposa. Sostuvo una relación amorosa con las dos mujeres simultáneamente hasta el día de su muerte. Entre la elite intelectual de los críticos de Karl Barth se encuentran Jim Cassidy, quien es el Presidente del Reformed Forum y pastor de una iglesia Presbiteriana en Austin, Texas quien alerta a los cristianos por medio de escritos y videos de YouTube que el Barthianismo no es el cristianismo histórico, sino una reinterpretación del cristianismo histórico con términos conservadores pero con conceptos totalmente nuevos y diferentes.
Recientemente la profesora de teología Christiane Tietz publicó la última biografía de Karl Barth en el 2021, “Karl Barth, Una Vida de Conflicto”. Se espera que tenga el mismo éxito que su biografía anterior la de Dietrich Bonhoeffer en el 2016 “Él Teólogo de la Resistencia: La Vida y Él Pensamiento de Dietrich Bonhoeffer”.
Después de todo lo dicho la realidad histórica es que no se puede hablar de la teología evangélica protestante del siglo 20 sin mencionar a Karl Barth. Aunque los cristianos evangélicos y conservadores tenemos muchos puntos de contención con Barth, lo cierto es que le debemos a él el haber puesto fin a la tiranía y al imperio de la teología liberal de Schleiermacher, Harnack y Wellhausen que dominaba todo el pensamiento y la literatura doctrinal del mundo Cristiano protestante en casi todos los idiomas europeos incluyendo el inglés.
Karl Barth, un hombre sin dudas muy polémico, pero también el único que puso a los liberales a temblar con sus conferencias, libros y enseñanzas. Si lo pudiéramos poner en un plano o línea recta entre liberales y conservadores, pudiéramos decir que Barth estaba a cinco pasos de los Conservadores a la derecha y a 95 pasos de los Liberales a la izquierda.
* Basado en parte en “Grandes Lideres de la Iglesia”, Editorial Vida, 1998.
Foto By Bundesarchiv, Bild 194-1283-23A / Lachmann, Hans / CC-BY-SA 3.0, CC BY-SA 3.0 de, https://commons.wikimedia.org/w/index.php?curid=51061479